De Carrión de los Condes a León 96,4 km

Cerca de 100km son los que se nos presentaban por delante en el día de hoy. En principio no temíamos grandes sorpresas y así ha sido. Paisajes áridos y km que pasaban casi sin darnos cuenta. Sí que hemos oído que muchos peregrinos esta parte del recorrido se la saltan por su monotonía y especialmente porque es el tramo más largo del camino sin servicios.

El perfil prácticamente plano nos han permitido mantener una velocidad alta en comparación con las etapas anteriores, una media de 15-20 km/h. Mi hermano Héctor ha cogido hoy buen ritmo y nos ha dejado atrás durante un buen tiempo. El viento ha aparecido hoy por primera vez desde que empezamos en Roncesvalles y vaya si pega fuerte! Venía del lado izquierdo y casi nos echa al suelo!

Casi todo el camino en este tramo se sitúa paralelo a la N-120 y resulta muy tentador hacer km en asfalto, que a estas alturas y después de tanta piedra no viene nada mal.

A medida que vamos avanzando vamos haciendo más amistades, Miguel de Ponferrada, Cristina de Granada, Dulce de Málaga, Diego de Valladolid, Montse de Barcelona... que nos acompañan en el desayuno, en el almuerzo o en la cena. Justo ahora hemos quedado en el centro de León para tomar unos pinchos y unos vinos y compartir vivencias del trayecto de hoy.

Mañana la difícil subida a la Cruz de Ferro, situada en una de las Cordilleras de los Montes de León. Aquí, según establece la tradición, cada peregrino debe depositar una piedrecita con su nombre sobre la pila que hay justo en la base de la cruz para así recibir la protección divina a lo largo del difícil camino al sepulcro del apóstol. Pues pondremos la piedrecita con el nombre incluido a ver si Santiago se porta y nos da un empujoncito en las subidas!

Hasta mañana!